HABIA UNA VEZ...

Con este encabezamiento solían comenzar los cuentos, los antiguos cuentos de hadas y princesas, de príncipes valientes y feroces dragones. Pues bien a partir de ahora todos los voluntarios tenéis nuevos deberes; Escribir vuestro propio cuento para compartir la bubisher experiencie con todos nosotros.

Sé que a muchos os costará un mundo lo que os pido, escribir es ardua tarea si no se disfruta, pero debemos dar vida a este blog que es nuestro cordón umbilical, el lugar donde reunirnos.

Miradlo de este modo, debe ser el colofón de la tarea realizada y sin esta aportación no estaría completa.

No dejéis pasar el tiempo, escribid con los recuerdos nítidos y los sentimientos a flor de piel, es la única manera.

Así que Martita, un esfuerzo más. Xevi cuando vuelvas con tus maravillosas imágenes, descríbenoslas antes de editarlas. Alex ve tomando notas para que no se te despiste nada y, Tirsa si te animas desde allí ve adelantándonos noticias, vivencias.

Queremos sentiros desde aquí, necesitamos sentiros desde aquí.

Los correos ya sabéis, a mi buzón, yo me encargaré de editar y publicar.

Un abrazo a todos y a obedecer, eh?

Luisa.

CUENTO DE LOS ALUMNOS DE 3º. COLEGIO MOHAMED AHMED.SMARA

MARTA.

Había una vez una mujer que vivía en el Sáhara y a la que le faltaba agua y comida.. y pasaba mucho frío. Un día, caminando por la dunas pensando en cómo dejar de tener sed, hambre y frío se cayó dentro de un pozo muy pero que muy hondo.

- ¡Ahhhhhhh! ¡Socorrooooooo!, gritó. 

Por suerte, pasaba un hombre por ahí que la oyó gritar y la sacó del pozo. 

-¡Muchas gracias, señor! ¡Que Alá le bendiga!

El hombre la invitó a su casa y le dió de comer y beber y un montón de mantas para que no pasara frío en la noche. Y ya sabeis: ¡barriga llena corazón contento! 

La mujer estaba tan agradecida que quiso demostrarle su gratitud con un regalo. 

-Como tú me has ayudado a mi, yo te quiero ayudar a tí hacíendote un regalo... - le dijo ella 

-¿Un regalo? pero si tengo de todo! - dijo él.

Ella estuvo pensando que cosa podría darle a él que no pudiera encontrar en el Sáhara.... 

¡Una caracola! pensó.

Y así fue como, un día, hizo un paquete con agua, comida y una manta y se fue, pasito a pasito, a buscar el mar.

Cuando llegó a la playa se quedó horas mirando la extensión infinita del mar... "parece un cielo salado" se dijo a si misma. Con mucha decisión se montó en una barca de unos pescadores y se fue a pescar con ellos pensando que en alta mar podría encontrar una linda caracola para regalársela al hombre.

En alta mar, su caña se movió.. ¡Un pescado había picado! Era el pez más enorme que ella había visto en su vida. Al abrirlo por la mitad, en medio de su tripa, encontró la caracola más bonita del mundo, llena de colores como el arcoiris.

Al acabar el día de pesca, se despidió de sus nuevos amigos los pescadores y empezó el camino de regreso al sáhara, a la jaima de su amigo que la había rescatado del pozo.

Al llegar, el hombre se puso muy contento de volver a verla y de contemplar la caracola tan bonita que le había traído de su viaje al mar. Por eso, esa misma noche, hicieron una cena en medio de las dunas.

- ¡Mira! -dijo ella - una estrella fugaz! Pide un deseo.

- Deseo deseo... -dijo él- que siempre estés conmigo.

Y así fue cómo el hombre y la mujer se casaron y fueron felices por siempre.

Con la colaboracion de Marta Alós.

EL VERANO EN LA HAMMADA.

El bochorno y el calor se habían adueñado de la tierra y el cielo, a partir de las once de la mañana el movimiento se paralizó en Rabuni. Nada se podía mover bajo los rayos de sol, parecía que de un momento a otro podíamos morir asfixiados porque nuestros cuerpos estaban al límite en aquella situación; la única esperanza que nos quedaba era que el viento del oeste, conocido como sahlia, empezara a soplar. Yo estaba totalmente paralizado, no sabía si mojar mi turbante con agua o la sábana de dormir, mis compañeros me decían constantemente “bebe té que es mejor que el agua fría de la garrafa”.Aquel verano fue uno de los más calurosos en los campamentos, los ancianos decían que no recordaban en toda su vida tanto calor. Por las noches, cuando las entrañas del desierto empezaban a respirar y aquel viento del oeste soplaba desde el océano, la vida volvía lentamente y todos cogíamos una manta y la tendíamos sobre la arena. En ese instante volvía el té verde del Sahara y con él volvían las palabras mágicas de la noche; en medio de la charla todos empezábamos a observar el cielo para predecir las temperaturas del próximo día, pero casi nadie acertaba, excepto un anciano que tenía una enorme capacidad de observar las estrellas y dependiendo de su brillo nos daba su pronóstico del tiempo. El conocimiento de este hombre sobre la astronomía y el tiempo estaba basado en su capacidad de observación y el nombre de los meses que sólo sabía en hasania. También nos hablaba mucho de los camellos, su comportamiento cuando hace mucho calor y su capacidad de recordar el lugar de un pozo de agua aunque solo hayan bebido allí en una ocasión.Nadie podía dormir dentro de las jaimas con esas temperaturas, todos se acostaban bajo la luz intensa de las estrellas o de la luna y la mayoría de las actividades cotidianas se hacían más de noche que de día. Porque el calor de la hamada siempre ha sido una eterna maldición para los saharauis habitantes del Sahel acostumbrados a temperaturas más suaves y a un clima menos duro.Cuando el calor quema la ropa, el suelo que pisamos y nuestro cuerpo, la única defensa que nos queda es buscar un lugar con mucha sombra y agua, y estar quietos sin correr ningún tipo de riesgos. De lo contrario podemos poner nuestra vida en peligro exponiéndonos a unas temperaturas extremadamente altas. Los beduinos que se dedican a criar ganado en esas condiciones siempre te aconsejan moverte lo menos posible, si acaso procurar hacerlo a primera hora del día o a última hora, nunca al mediodía. Recuerdo que en una ocasión salí detrás de las huellas de unas cabras, quería alcanzarlas y llevarlas de nuevo hacia el frig, pero mis nulos conocimientos de orientación en el desierto me impidieron localizarlas y de repente me vi perdido sin agua en medio de la nada. Decidí subir a una montaña que estaba cerca para observar todo lo que estaba a mi alrededor y de repente vi unas cuatro jaimas. Yo, que tenía bastante sed, me alegré mucho y bajé hacia allí a toda prisa. Cuando estaba cerca, justo frente a la jaima, un hombre de cincuenta años me saludó invitándome a entrar y luego me preguntó:- ¿Como has llegado hasta aquí sabiendo el calor que hace?- Me he ido desde el frig de mi familia detrás de unas cabras, las cuales casi doy por perdidas pero me alegro mucho de haberos encontrado porque estaba sin agua y si no fuera por vuestra hospitalidad estaría en estos momentos prácticamente deshidratado.- La vida en el desierto es la capacidad de una persona de asumir los riesgos sin perder nunca el sentido de la precaución- sentenció el hombre.De sus palabras comprendí que el verano en la hamada es una estación donde el sol inicia su reinado a partir del mes de mayo hasta octubre; durante todo ese tiempo nuestros frágiles cuerpos bailarán de sudor escondidos debajo de una darra y tapados por un turbante negro que distingue a los saharauis de otros pueblos nómadas que habitan el desierto.

Ali Salem Iselmu

UNA ESTRELLA POLISARIA PARA OSCAR

Hola buenas noches Luisa: No me cansaré lo suficiente de agradeceros a todos (hola buenas Antonio también te escribo el mail a vosotros para que le dijas a Cris, Silvia y los demas que por aquí todo bien) Como van las cosas con los profesores (buen trabajo el que lleváis a cabo, una labor necesaria y en mi modesta oponión echa con mucho sentido y profesionalidad).

Por cierto ya he visto que el proyecto del Bubi tiene una nueva animadora, de todo corazón y aunque no la conozco, muchos animos Marta, y sin dar consejo diré de corazón, deja que tu corazón te lleve.

Este mail también va a dirigido a Gonzalo, espero que sigas plasmando sueños y contagiando tu utopía de vida construyendo un mundo mejor para todos cada día. Muchas gracias por esta gran oportunidad (si el Bubi sigue y me dejáis algún día no lejano me gustaría volver). Que no se me olvide, dile a Irene que increible lo del video y que ojalá el tiempo haga que podamos coincidir y hacer algo juntos sobre lo del Sáhara, sin que suena a pelota, creo sinceramente que tienes un potencial increible.
Javi no se donde estarás cuando llegue este mail, pero muchas gracias por compartir este viaje a mi lado y por aportar esa forma diferente de ver las cosas, no pierdas nunca esa inocencia que se esconde detrás de tus ojos y ojalá algún día aparezca esa llamita que buscas para encender tu corazón. Gran trabajo y que la vida te siga sonriendo trotamundos soñador. Que no se me olvide, un gran abrazo a Miguel, los dos tenéis mucha suerte de teneros el uno al otro.

No se si eso de que los últimos serán los primeros es cierto pero no quiero dejar este correo si dar mi más sincero agradecimiento desde mi corazón a ti Rubio y a toda tu familia, en esos días duros tus historias, los juegos de Rabat, Mohammed y el gran Mulei (el Sáhara tiene un gran futuro por delante), y esos mil cuidados y atencionesde Sheiba, hicieron que todo fuera mucho más sencillo, nunca os podré agradecer lo suficiente lo que habéis hecho por mi. Espero pronto poder agradecerlo en persona.

Bueno una vez más y mil vidas no serían suficientes para agradeceroslo, muchas gracias por todo vuestro apoyo y por hacer que este mundo sea un poquito mejor cada día.

Un gran abrazo para todos y que las estrellas del Sáhara os enseñen el camino a la felicidad y el amor. Hasta pronto.
Oscar.

Nuestro regalo para ti: Una estrella polisaria.
http://www.youtube.com/watch?v=bX0qB4hgNYw

MARTA ALÓS YA ESTÁ TRABAJANDO

Acaba de llamar. Esta mañana (sí, domingo, allí es día de trabajo), ya ha entrado con el Bubi en una escuela de Smara y ha cubierto dos aulas. Feliz y emocionada. Pronto escribirá un post, pero de momento es una maravillosa noticia. Javier debe de estar llegando a Alicante, pero ella ya ha tomado el relevo. Sin maleta, eso sí, porque se ha perdido en Argel y no la recibirá hasta el martes. Salvo ese pequeño accidente, es un placer saber que una vez más todo funciona. Y que los niños siguen descubriendo cargamentos de sueños.

Dios¡¡ Martita ya está trabajando, aún ante ayer cuando hablaba con ella, entre emocionada estresada y con ciertos problemillas de útima hora que ojalá no sean nada, sabiamos perfectamente que a pesar del lógico vértigo que nos producía la vuelta de Javi, el relevo que llegaba estaría a su altura.

Marta dará lo mejor de sí y aunque su estancia será más corta de lo que ella quería, dejará una enorme huella. Baraka Marta y a por todas.

DAY BY DAY

Por la mañana el Bubisher está en la escuela Abda Moahamed; Busrid y Ali Laman, maestros de español, se llevan cada uno 15 ejemplares iguales de los de la colección media lunita, así como también con un lote variado de álbumes, “Frederick”, “Los tres ladrones”, “El viaje de Pancho”, “Un barco en el cielo”...todos libros para ver y trabajar con los niños en clase.
Un rato después, todavía en el cole y a bordo del Bubisher, Abdulah está dibujando con ceras de color marrón la cabeza de un caballo; sus compañeros de clase, que poco antes también han estado viendo y leyendo cuentos, pintan ahora mariposas, jaimas, osos, banderas, niños...

Después de comer, Dargalha, que está recibiendo clases de español en la Casa de la mujer, viene a devolver el diccionario de español-árabe hassanía que se llevó en préstamo ayer.
Marin trae también “Dignidad”, un libro de fotografías hechas aquí en los campamentos y que entregaron en donación el otro día.

Por la tarde Mai y Salka se hacen cargo del Bubisher; un par de horas subiendo y bajando niños, repartiendo libros a unos y otros, buscando un sacapuntas, o poniendo la música saharaui más marchosa en el ordenador...

A un pequeño grupo de niñas, Memona lee Blancanieves (no la de Disney, una versión publicada por Kókinos); va leyendo un trozo en español, y después contándolo en hassanía; luego, ya a su bola, una de las niñas, Aglaham, se pone a mirar, con muchísima atención, las ilustraciones del libro.

Zuber viendo el cómic “Tito Longueirón” reconoce en una fotografía al final del libro a uno de sus autores, David Pintor, al que conoció en Lugo.

Cuando entra la noche les toca a los adolescentes y jóvenes. Algunos libros, pero sobre todo más música y mucha conversación. Entre otras y otros, está otra vez aquí Dargalha, con sus ganas de aprender español.

Y todo este rato, Mohamed Ali de dos años y medio no ha dejado de subirse a la mesa, coger esto y lo otro, hacer por pintar las paredes con rotulador, tocar las teclas del ordenador... además de haber intentado sabotear de otras tantas maneras posibles este mail guardado ya mismo en el pen drive.

Muchos besos a todos, Javi.

FOTICOS DE CRIS, BUBIMURALES.

Olé pal arte de los niños, y el trabajo de los profes. Los Bubimurales están que se salen de la pared. Hay algunos realmente espléndidos, fijaos en la foto del medio, hay dibujos de 10.

Bravo¡¡¡
Fotos de Cristina Penichet, qué no Pinochet, como le ponen por ahí a la pobrecica.

LLEGAMOS A SMARA

Desde Smara.
Ayer por la tarde tuvimos record de visitantes en el Bubisher. Calculo que sobre unos 80 niños en un momento u otro se subirían al camión. De haber estado yo solo la cosa hubiera sido imposible, pero, y después de distintos ensayos en Auserd y el 27, he encontrado una manera de trabajar que permite estos líos. Se trata de encontrar a dos o tres niñas y niños mayores o ya adolescentes, con la suficiente personalidad pero sobre todo con muchas ganas, para que preparemos las actividades y demás juntos.
Aquí en Smara he tenido la gran suerte de dar con dos chicas y un niño, Fatimetu, Mai y Beiruk, que se lo están currando pero a base de bien. Y yo mientras, igual que en las escuelas, intento pues cada vez intento ir cada vez haciendo menos, confiando en que la combinación a partes iguales de gusto por la invisibilidad y fe en las virtudes de la no acción al estilo taoísta, sean mi mejor inspiración. Eso sí, cuando hace falta, aparezco... Por ejemplo, nada de pegarse en el Bubisher, que aquí estamos para disfrutarlo todos.

Como en los coles están de exámenes no empiezo a trabajar en ellos hasta mañana. Ya os contaré. Y lo dicho, que puestos a no hacer..., pues que hoy tampoco escribo más.
La semana que viene: mi último correo antes de volver a España junto con bienvenida, buenos 'animos y mejores deseos para la voluntaria de estreno, Bea.


Mai acaba de llegar y dice del Bubisher que “Está chulo y ya está”. Pues eso.
Muchos besos,
Javi