jueves, 13 de enero de 2011

LA SOLIDEZ DE LO EFÍMERO



Así de real, así de concreto es ya el Nido, visto por el objetivo de Candi, una de las últimas voluntarias que ha dado su tiempo y su esfuerzo a llevar libros y sueños a los niños de Smara.
Es curioso que mucha gente se extrañe (aunque al mismo tiempo le encante) de que estemos haciendo un edificio en un campamento de refugiados. Por definición, un campamento es algo temporal, aparentemente destinado al abandono y al olvido. Es verdad: los campamentos serán un día historia, los saharauis volverán sus territorios históricos, las lluvias y el siroco se encargarán de ir desgastando primero y enterrando después los biut, no quedará rastro de las jaimas. Pero no el olvido. Quienes han nacido en la hamada y en ella han enterrado a sus muertos volverán, no olvidarán nunca la que ha sido su tierra de acogida.
Y más allá de la nostalgia, o mas acá, la realidad: hoy, mañana, el curso que viene. En nosotros mismos ha pesado el argumento, y dar el paso adelante, comenzar a construir la Biblioteca Pública de Smara, tiene algo de crudo realismo: sí, algún día, mejor antes que después, lo dejaremos vacío, el Bubisher levantará el vuelo hacia la costa. Pero hoy es hoy, mañana es mañana, el curso que viene es el curso que viene. Quién sabe de dónde llega la magia. Una niña de Zamora me preguntaba no hace sino unos días si los saharauis creen que la magia les puede devolver su tierra. Claro que lo creen. Y nosotros también: la magia de los cuentos, la magia cotidiana de la cultura. Ojalá sea esta la magia, seríamos enteramente felices si no llegáramos a inaugurar el Nido, si tuviéramos que amontonar los libros en el Bubi camino de El Aaiun, si atravesáramos el muro desarmado, si volviéramos con los que, sin duda, volverán.
Pero hoy, pero mañana, pero el curso que viene. Los niños, los jóvenes, los adultos, sentirán que no están solos, que la cultura y los muros del Nido les ayudan a hacer menos terrible el exilio, el abandono.
El Nido es efímero, claro que sí, y cuanto más efímero mejor. Pero hoy se va levantando, sólido y magnífico. Resistiremos antes que rendirnos.
Gonzalo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mientras llega el regreso, este será un espacio de libertad, de cultura, de encuentros. De ruptura de muros.
Impresiona ver cómo crece.
Palma

Chema García dijo...

Ha sido emocionante leer tu relato. Un saludo!!

momo dijo...

Hace poco me preguntaba una amiga si en agosto ( es cunado ella tiene vacaciones se puede ir a colborar con voostros en lo que sea.