lunes, 23 de noviembre de 2009

DÍA A DÍA



La voz de Begoña sonaba alegre esta noche. Y triste. Alegre porque el trabajo sigue a buen ritmo, porque, a pesar de algunas dificultades, los maestros saharauis valoran muy positivamente la labor del Bubisher en las escuelas, porque el mar sigue avanzando, porque cada día son más los niños y los adultos que se sienten atraídos por el proyecto, por los libros, por las actividades que no cesan.

Y triste porque pronto tendrá que regresar. El día 4 de diciembre cogerá el avión para España, dejando en Smara un trabajo de dos meses y pico, muchas vivencias, y, sin duda, un trozo de su corazón.

Toñi, al igual que Begoña, ve como el tiempo transita de una forma extraña cuando estás en los campamentos: Sereno día a día, pero veloz cuando miras hacia atrás o hacia delante y ves lo mucho que has vivido desde que llegaste, lo mucho que aún quieres hacer antes de tu regreso.

Y en eso está. Y con mucho éxito. Su taller de hábitos saludables ha sido acogido con entusiasmo por los niños, que han participado con mucho interés en todas las actividades propuestas. Y es que, a pesar de que el nivel de español en algunos casos no es muy alto, las imágenes, la expresión corporal, las palabras que viven en los cuentos y el deseo de aprender de los escolares facilitan la comunicación. Y a mejor comunicación, más posibilidades de que el nivel suba, de que los niños se interesen por los libros, por nuevas experiencias, por ver, por saber…Más posibilidades, en definitiva, de que su capacidad comprensiva y expresiva aumente.

Caminamos. Poco a poco, día a día. Con ilusión y con la esperanza de que las palabras abran caminos y rompan los cercos del sinsentido.


Foto de Tirsa Alonso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Begoña no te desanimes, siempre prodrás volver y aportar nuevas cosas al Bubisher. Un abrazo desde Canarias. T.

Bubisher dijo...

Begoña, hoy he estado con Julia en Betanzos. Julia tomará tu relevo, y lo hará con ganas. Te esperamos pronto, para que cuentes tanto, tanto que no debe de caber ya en tu memoria.
Un beso desde aquí, a la espera de uno de verdad.
G.